Para 2016, los Reds del norte de Inglaterra reemplazaron el blanco por el amarillo luego de muchos años para sacar al mercado una edición limitada que se agotpo muy rápido en tiendas oficiales y en locales de ropa deportiva. El color blanco no aparece en las medias y en el pantalón, dejando así todo el protagonismo al negro y los detalles amarillos. Los Reds terminan la temporada de la Premier League en un modesto quinto puesto, por lo que intentarán con todas sus fuerzas volver a estar en lo más alto durante la próxima con el objetivo de alzarse con el título por vez vigésima.
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