Tras los años dorados de Umbro (2009-2013), la firma de Oregón pasó con más pena que gloria por la capital vizcaína, segunda equipacion españa con diseños por lo general poco atractivos y basados en templates genéricos de la marca. Pero no siempre fue así, hasta el punto que la selección española llegó a jugar ¡ Su recorrido en las categorías inferiores de la selección española fue igualmente coincidente y, de la mano, se adentraron asimismo en la escuadra mayor. Si en los inicios, las pioneras no tuvieron ningún apoyo oficial, el acto de homenaje tuvo una amplia representación de los dirigentes del deporte español. Se se le pierde el rastro poco después de ese partido de la sub 15. Jugó en las cantera del Elche y del Hércules. Tras la reanudación España continuó siendo un martillo pilón en el que contribuían todas las jugadoras, desde Sonia Ruiz hasta Lourdes Ortega, Sira Moros, Beatriz Zudaire, Agurtzane Eguiluz o Almudena Montiel. De hecho, se espera que en el compromiso del mes de Noviembre ante Malta en Cádiz y Rumanía en el Wanda Metropolitano, España estrene camiseta, que, por supuesto, será Adidas.
Pero España eligió como segunda equipación el negro, un tono oscuro poco diferenciable del rojo de la primera equipación. Ninguna imagen como la de Luis Enrique sangrando por la nariz en la eliminación ante Italia refleja mejor lo que era la selección hasta el cambio de guión que se produjo en 2008. Allí también España iba de blanco. Junto a Luis Rubiales, presidente de la RFEF, estuvieron presentes Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español, y María José Rienda, presidenta del Consejo Superior de Deportes. El defensa se encaró con el colegiado tras señalar una falta en contra del Real Madrid. Tal como ha confirmado Albuixech a La Vanguardia, ambos cumplieron y Sergio Ramos entregó la bolsa al colegiado que, a su vez, se la dio a su último destinatario, Juan Carlos. El defensa andaluz le entregó una bolsa en la que había una camiseta del Real Madrid firmada por todos los jugadores blancos.
Ese día no podía acudir al Santiago Bernabeu por lo que pidió que entregasen la bolsa a Hernández Hernández, íntimo amigo suyo. Con ocho años le hicieron un implante coclear que le permite escuchar el silbato del árbitro, además de atender a sus compañeras. Estas tres franjas eran blancas pero las dos del centro (que en teoría debían ser azules, como el fondo de la camiseta), eran una azul y la otra roja. En el recuerdo de todos, el terrible error de Zubizarreta en el segundo tanto de los africanos, cuando metió el balón en su propia portería al intentar despejar un centro desde la izquierda de Lawal. Ni que decir tiene que esa camiseta fue un verdadero talismán para la Francia de los Platini, Amoros o Luis Fernández, que logró su primer título internacional tras derrotar a nuestra España arconadiana en un partido de infausto recuerdo. Se acabó el uniforme completamente rojo que llevaba desde el Mundial de Brasil, de tan ingrato recuerdo y tan poco apreciado por los aficionados. Su pasión y destreza con el balón, que desde pequeña la acompañaba a todas partes, acabó convirtiéndola en una de las jugadores más prometedoras del panorama futbolístico femenino en España.